Lekeitio – Gametxo
Alardi 2013
Salimos de Lekeitio con muchas ganas y prontito, para poder tener marea baja en la zona de Ogeia. Pero resulta que Lekeitio está precioso con el sol mañanero y nos hinchamos a sacar fotos.
Como el desayuno del hotel ha sido bastante flojito en fruta, en la tienda de Miren, en una karrika vieja de Lekeitio, compramos unas cerezas, una nectarina y una manzana. Lavamos la fruta en una fuente situada allí mismito y vamos comiéndola.
En una hora y media ya hemos visitado Lekeitio entero y su faro de Santa Catalina, y estamos comenzando las primeras pendientes del monte Otoio. Estamos muy flojos hoy, nos cuesta mucho subir….demasiada fruta??
Dos horas y diez minutos después de salir de hotel, estamos en la cima de Otoio, en el buzón. Se ha hecho muy duro, pero desde allí vemos la marea baja de la cala de Ogeia (Ispaster), y nos animamos: está precioso.
Salimos a las rocas de la cala y bordeamos por el mar hasta encontrar al “amigo” que queríamos visitar; un moái natural que otea el horizonte como un perro guardián bien adiestrado. Serio, enhiesto, con el ceño fruncido,…es todo un profesional en ésto…llevará años ya en ello… Y esperamos que dure muchos más.
Por una cala llamada Ubidepe, remontamos hacia el alto de Bedarona, que alcanzamos a través de Urtza, un precioso caserío junto al que cambiamos ropa y calzado, reponemos líquidos,…
Cruzamos Bedarona, Olabe, y nos plantamos en Ea,por cuyo centro descansa sus aguas hasta el mar el río Argin.
Tomamos cuesta arriba otra vez, hacia Angelutxu, pues no hemos sido capaces de encontrar el camino directo hacia la cala Aldebazter, una preciosa lapatza que es de obligada visita.
Una vez en Angelutxu, hablamos con el propietario del agroturismo Andutza, un precioso caserío situado a pocos cientos de metros de Aldebazter (los locales le llaman lapatzie, a secas). Las indicaciones, que incluyen una vuelta hacia atrás bastante traumática para el planning que llevamos, nos hacen eliminar la opción de nuestra ruta. Ya volveremos en otra ocasión.
Tiramos entonces hacia Natxitua y, desde ahí, bajamos hacia terrenos de Ibarrangelu, que nos da la bienvenida. Pasamos por su barrio de Arboliz, probablemente donde hemos pasado el calor más intenso desde que salimos de aquel río Atturri, hace ya varios meses… (da la sensación).
Ahora nos toca visitar Elantxobe, uno de los pueblos más carismáticos de la costa vasca, con un “puerto de mar”, de tradición pesquera y, encima, un “puerto de montaña”, de primera categoría, todo en uno! La calle central va de puerto a puerto prácticamente sin descanso. Menudos gemelos que deben tener las amamak locales! A mitad de ascensión, coincidimos con el autobús, cambiando de sentido, en la estación “cul-de-sac” más curiosa que jamás hayamos visto nosotros.
Una vez en la parte alta de Elantxobe, nos dirigimos por el cementerio hasta Lagaburu y, de ahí, bajamos hasta Lastarri para coger el paseo peatonal que nos lleva a Laga.
Mención aparte merece Laga, una preciosa playa, bajo la peña Ogoño, un macizo calizo “monobloc”, grandioso. que se asoma en el mar con gran poderío.
Seguimos junto a la carretera hacia la cala de Antzora, y por todo el camino ya nos estamos enamorando de la isla Izaro; majestuosa. Desde esta cala subimos hacia Gametxo. Ya estamos metidos de lleno en Urdaibai, que mañana bordearemos.
Ha sido una etapa dura, rompepiernas. De Lekeitio hemos subido Otoio para bajar a Ogeia, luego hemos subido Bedarona para bajar a Ea, a Natxitua para bajar a Elantxobe, a Lagaburu para bajar a Laga y subir después a Gametxo. Y calor…ha hecho mucho calor….